Una semillita que da resultados...

No creo que haya comentando aquí en el blog que empecé a dar clases de inglés en el colegio donde me gradué yo aquí en Venezuela. La verdad que nunca me imaginé que volvería al colegio donde me gradué y muchos menos me imaginé que volvería como profesora...o mejor dicho, como teacher de los niños de pre-escolar y primaria.

Y es que he vuelto a mi antiguo colegio para darles clases de inglés a los más pequeños. Debo de confesar que al principio, quería darle clases a los adolescentes del liceo porque pensé que serian más fáciles de enseñar y de manejar...pero confieso que ahora me está gustando la idea de estar con los más chiquitos del grupo y le he agarrado mucho amor al asunto.

Confieso que no he tenido mucha experiencia en el área de educación, pero no creo que haga falta mucha experiencia pedagógica para darse cuenta que muchos de los chicos en el colegio necesitan de alguien que les brinde algo más que una educación - creo que necesitan alguien que los escuche y los ayude a ser mejores personas. No seré psicóloga ni psiquiatra, pero sé dar mi absoluta atención cuando alguien necesita ser escuchado.

Y un grupo de chicos que de verdad necesita este tipo de ayuda son los chicos del 6to grado. Lamentablemente son chicos que quieren estar unidos como grupo pero la realidad es que no lo están. Algunos de estos niños necesitan alguien que los escuche para ayudarlos con sus problemas...esos problemas que solo los niños sufren cuando están en esa fina linea entre la niñez y la adolescencia. Y no digo la ayuda de un psiquiatra o psicólogo que creen que una medicina anti-depresiva pues les quita toda inquietud. Es el tipo de ayuda donde ellos no quieren ser juzgados, ni catalogados ni drogados...simplemente una ayuda comprensiva, sentimental y que de verdad los escuche como tal.

Además de la desunión entre ellos, he observado que son niños que están algo rebeldes con algunas profesoras. También están algo flojos, a pesar de lo inteligentes que son. Y el nivel de razonamiento de algunos de estos chicos es simplemente genial y la verdad que hay que aprovechar esto para cultivar más educación, cultura y humanidad a estos chicos ya que son el futuro de nuestra Venezuela.

En vista de estas cosas, quise colocar mi semillita...mi aporte a este grupo. A pesar de ser la teacher de inglés, ayer me tomé la libertad de hacerles una dinámica de integración. Les dí 5 palabras en inglés: TRUST (confianza), FRIENDSHIP (amistad), LOVE (amor), RESPECT (respeto) y COMMUNICATION (comunicación). Y bueno, una 6ta palabra surgió así sin querer, la cual fue: COMMUNITY (comunidad).

En resumidas cuentas, los chicos recalcaron algunos problemas dentro del salón y que estaban relacionados a las palabras dadas. Después, en grupo, les pedí que buscaran algunas soluciones al respecto. La verdad que me encantó verlos todos sentados en sus grupos, discutiendo las posibles soluciones. Luego, cada uno expreso las mejores soluciones posibles y prometieron que tratarían de acatarlas para así unirse más en grupo.

¿La semillita que sembré? definitivamente darles el chance de ser escuchados por alguien que de verdad quiso darles apoyo. ¿El resultado? les gustó la actividad y quedaron con ganas de volverlo a hacer. ¿Una consecuencia positiva? prometieron tratar de seguir las soluciones que ellos mismos presentaron y, para mi sorpresa, esta mañana me enseñaron con orgullo una pequeña muestra de su compromiso. En una de los pizarrones que tienen en su salón, escribieron las palabras que yo les había dado para así recordarse que deben de seguir trabajando en la unión, compañerismo y amor que ellos necesitan como grupo.

Y como dicen hoy en día, de pana que eso me alegró mucho el día...

¿Cuál será el resultado final?

¿Tendré un final feliz con estos chicos?

Tengo 2 meses para saberlo